sábado, 25 de septiembre de 2010

sábanas con sordina y leche con galletas

A veces pero no siempre
me gustaría preparte el desayuno cada mañana
solo por hacerte el amor en la encimera
A veces pero no siempre
el fulgor de tus ojos no es nada
comparado con el calor de tus muslos
al roce de mis dedos
y aqui empieza todo lo sucio
de este encuentro


Se cae la leche al suelo
y un rayo de sol entra por la ventana
cuando tu dejas de ser morena
y yo dejo de intentarlo y te tengo

lo bueno del amor cuando termina
es que luego volverá a empezar
no como mi juventud
que se me escapa entre los dedos
con la fragilidad de sentir que lo que hago es importante
y sin embargo no durará eternamente.

El sexo contigo tampoco.