miércoles, 29 de junio de 2011

60 hormigas

Hoy, hace apenas un minuto
un gato del Albaycín
me ha declarado su amor
con un pájaro muerto
en la puerta de mi casa.
Yo le he dicho que si volvía con helado
del Mercadona, por supuesto,
le hacía un hueco en mi cama
y leíamos poemas de amor, de Jaime,
de esos
que hacen que hasta las hormigas
se reproduzcan
como los panes y los peces
por obra del lenguaje
y de las semillas que papá
dejaba en mamá
hasta hace apenas
un par de años.
Justo cuando los reyes
empezaron a dejar de serlo
y se convirtieron en un poema de
a diez euros la hora.

Sin tabaco y con esto pelos

Una lee listas de libros vendidos
y se cree más lista que nadie
solo porque no está en ellas.
Una lee los horarios de tutorías de la universidad
y ya sabe cuáles serán las horas
que nunca pondrá en atención.
Cuando nos hemos bebido más de cinco cervezas fresquitas,
como me dicen que de un tiempo a esta parte me estoy volviendo,
es cuando abro el portátil y escribo
el poema de amor que nunca será amado.

Qué harta estoy de todo
en esta ciudad,
donde los volúmenes de poesía
se publican con números romanos para engañar
a aquellos que esperan un segundo.
Sin saber que la otra sentimentalidad
ha muerto con la sarna de los gatos del Darro,
que escucharon cómo se marchaba aquel que nunca se vendió
para quedar más solo que la una.
Ya me marcho también,lo sé,
se ha roto un vaso en la mesa cuando te he enseñado mi sonrisa,
cuando he pronunciado tu nombre,
cuando te he dicho al oido
que sabía cuánto costaba el peganmento en el supermercado
porque lo compro para mi corazón,
cada vez que voy a comprar tu libro,
y me cuentan que a la Atlántida
nunca llegan las cosas a su tiempo...

domingo, 26 de junio de 2011

Gin tonic

Nunca toco el minibar de los hoteles
siempre terminan por traicionar aquello
que más quiero
mi libido

Nunca, y cuando digo nunca
es un a veces
miro por la mirilla
cuántas rubias tienen el
" no molestar" puesto en la puerta
y si no son muchas
las llamo para ver,
solo para ver
si se aburren tanto como yo.

Si eso pasa,
se cruzan y abrimos la nevera
como quien reza un padre nuestro
sin apenas acordarse.

Después de todo,
solo después,
nos santiguamos con
premeditación y alevosía
decidimos cuándo y dónde confesamos
los pecados
y tras lamernos
por última vez las amigdalas
nos damos los números del móvil
y ya veremos si llamo.....

De eso se trata, de mirar a través de los cristales

A Alicia que, buscando, encontró el título
de este poema.



Nada importa cuando se trata de ti
de mí
de un tu sin acento porque me tienes.
Nada importa cuando tengo un pequeño cuarto
barato,
eso sí,
en el que esconderte de todos
en el que llamarte puta.

Nada importa cuando no eres tú
quien se mira en el espejo cada noche
sabiendo que no solo está
perdido
sino que está solo
y lo sabe
y eso le salva.

El sexo es lo de menos
cuando se trata de sentir
como un cristal lacerando mi piel
en cada esquina
donde elijo
a quien quitará el acento de mi nombre
cada noche sin saber
que aún queda tiempo de cambiar
las sábanas de ayer
por unas limpias que huelan a lejía.

Es curioso cómo
con qué poquito amor
me has vuelto vulnerable a la
ginebra en un bar de carretera
donde tus muslos y los míos
se hicieron hermanos de sangre
y se emborracharon sin un duro en el bolsillo
solo con rozarse.

Para tener tu nombre o el mio
hay que ser muy sinverguenza y querer
hundir el rostro en la arena de una playa
que nunca hemos pisado.
Hay que tener claro
que uno deja la ciudad
y el piso
y no por ello
deja de ser puta
o parecerlo.

viernes, 24 de junio de 2011

amistad subliminal

Pasan lentos los días
y muchas veces estuvimos solos.
Pero luego hay momentos felices
para dejarse ser en amistad.

Jaime Gil de Biedma



No sabía yo que esto del verano
traía vacaciones también
para el alma.

Es curioso cómo,
mecida durante un tiempo
en la Balsa de la Medusa
me inmunicé a todo lo que no fuera
reír contigo.

No sé si serán los 90 días
tan largos como las 90 noches
que pasaré a tu lado
hablando de poesía.

Rompiendo unas reglas del arte
inventadas por nosotros
que comenzaron en invernales horas
y no van a terminar
sino en un bar de carretera
donde tú y yo nos encontramos
leyendo el mismo el libro
llorando los dos,
de pena.


No me gustan los meses de verano
porque es como si a hurtadillas
se llevaran todo lo que tengo
sin avisarme ni siquiera
con una nota llena de faltas de
ortografía.

Que vivas todo lo que puedas
hasta que te vuelva a ver
y me lo cuentes

Yo te preguntaré si has sido feliz
y tú me responderás que sí,
porque sabías que la nuestra
es una amistad a lo largo
de esas que no se cuentan por días
sino por la publicidad subliminal
de lo que nos hemos dicho.

viernes, 17 de junio de 2011

Camino de baldosas amarillas

Tengo mucho sueño
pero te sigo soñando despierta
en una isla perdida
leyendo palabras imposibles.

He bebido más de la cuenta
y comido pizza y arroz como palomitas
en el cine, en el que la felicidad
es sentarse en la butaca que quieres
y salir poniendo a parir
la película que has visto
si es conmigo.

He sonreído gratis durante toda la tarde
a extraños y lejanos de una manera
tan cercana que parecían tú.

Me he caído por las escaleras pensando
que seguía el camino
de baldosas amarillas
y al final no estaba el hombre de hojalata
sino Dorothy.
Yo era el espantapájaros.

Siempre nos quedará París,
me dijiste al oído antes de que yo
te dijera que odio el francés,
que hablo perfectamente el italiano
que el chocolate que más me gusta es el suizo,
y que te he dejado por otro.

Bueno, esto último,
aún no lo he decidido,
pero en ello estoy...

miércoles, 8 de junio de 2011

Anochece en Granada

Hay muchas ventanas encendidas
en Granada,
y yo las veo.
Muchas vidas escondidas tras
cortinas de colores,
que no viven.
Existen amigos que te cuidan
mientras te abrazan
y te dicen que lo sabes.
Lugares que nunca cambian
a pesar de 60 años cumplidos.
Aires que respiran contigo
para que no decaigas,
Chinos que regresan
de Pekín,
con una cesta de naranjas.
Hay muchas ventanas encendidas
en Granada.
Pero ellas no saben que las veo
mientras, les pago la factura de la luz.

Mirlo

Estoy cansada,
y sigues sin volver,
aquí, desde la terraza que
tanto te gustaba
he visto atardecer
y se hace tarde para nosotros.
Un pájaro negro
con el pico naranja me saluda,
me estaba esperando.
Estoy cansada,
se me cierran los ojos
apenas si te veo,
y mis pies cansados de andar
sobre mí misma,
me reclaman un respiro
y enciendo un cigarro.

Estoy cansada,
el año ha sido
el más difícil todavía
a pesar de tu presencia,
y se ha ido el sol.

Una línea naranja también
como el pico del pájaro que ya se marcha
me indica que ha llegado el momento
de dormir,
soñar contigo
y saber que cada uno de nosotros
tiene su propia dramaturgia vital
y que la dirigen los cientos de
gorriones
que invaden el campanario de la iglesia
que está rota como yo,
por poco tiempo.

martes, 7 de junio de 2011

Con su permiso

Señora, me acaban de preguntar
cómo le escribo lo que escribo
con tanta facilidad
y tanto empeño.

Sabrá usted, espero,
que no quiero ofenderla
que solo quiero como decía un poeta
saber qué es justo,
qué es real
quien es y hasta cuándo se queda.

Sabemos todos, Señora,
que por la noche
los gatos son pardos
y la literatura es ficción
pero también sabemos
que podemos ver
los colores que queramos
si somos nosotros
los que estamos haciendo unos nuevos.

Pues bien Señora,llegados a este punto
aquí le dejo de nuevo
mi arrogancia,
y las palabras mezcladas con desdén
y este insomnio mal curado
que me deja leer todo
lo que quiera
pero no me asegura
que sea capaz de comprenderlo.

Buenas noches, Señora,
si acaso ya en la calle nos vemos,
al fin y al cabo
es donde mejor me muevo
y donde puedo decirle
exactamente dónde quiera
lo raro que es no saber
qué me pasa con usted,
porque cuando me la encuentro
si miro para atrás
veo correr a mis pudores
escapando de nosotros.

Y Señora, de verdad
dígame,
porque no entiendo....
¿ Sabes?, cada vez que entro en la biblioteca
me preguntan por ti, sin saber quien eres
y oigo tu risa ausente
desde hace casi que dos semanas.

Hoy he cogido un libro
en el que estabas
escribiendo entre líneas
sobre cómo vivir la vida
que no hemos elegido.

Y de repente me ha sonado el móvil
y he visto tu foto en mi cabeza,
pero no lo he mirado siquiera
por si no eras tú.

¡ Qué miedo de amor,
qué miedo!

No sé dónde estás
pero me ha parecido verte
entre el libro sobre Hopper editado en Taschen
y el de Kandinsky de Turner.

Creo que estabas metida dentro del segundo
sí,
porque cuando lo he abierto
quedaba aún un rescoldo de tu perfume,
ecos de tu risa,
y una mancha de chocolate aún reciente.

No te preocupes,
me he traído lo dos a casa
vamos a hacer un trío
mientras llegas,
hablaremos de colores y sonidos
y de cómo el cielo de repente
se ha puesto tan negro
que parecía que no ibas a volver nunca.

Antes de acostarme
he mirado el móvil
pero como no tengo apenas saldo,
prefiero que llegue mañana
y me vuelvas a llamar al verme
entrar en la biblioteca
a por un libro de Almudena Guzmán
que tú me hayas recomendado.

viernes, 3 de junio de 2011

Música

"No gimas hacia dentro"
Antonio Carvajal


Cuando a uno se le enternece el alma
solo corre un riesgo,
que nunca volverá a ser el mismo.

Mientras,
las notas de música
entran por mi nariz
y cierro mis ojos.

Entonces, son los tuyos tambien
los que se cierran para no ver
las lágrimas correr por mis mejillas.
Y retiras un mechón de pelo de mi cara.

Te miro desde aqui
y tú me miras y me dices
que me quieres.
Te dejo yo marchar
y sonríes.

Adiós, Granada
susurras al oído
siempre habrá un sostenido
que alargue esta agonía .

Siempre será el sonido
de tu voz
el que me traiga
a esta " pequeña patria huída".

jueves, 2 de junio de 2011

Curso

Me sobran las palabras
para reconocer que te quiero
aún sabiendo que no sé que es
querer
y mirando cómo se va
la tristeza que tanto te pesaba
un 30 de Septiembre
cuando tus ojos buscaban un poema
y yo te escribí
exáctamente 30
a fecha de hoy
1 de Junio.