Con un gracias nos basta
para saber que existimos mutuamente
que las calles siguen puestas
y los periódicos en venta
malvendiendo las noticias.
Que la vida no pasa sino pesa
también una mañana de domingo
pero menos,
que nos queremos lo justo
para mirarnos al espejo
y saber que estamos vivos
y además,
porque queremos.
La sección de Cultura ya,
tiene dos páginas menos,
la bolsa cae mientras
te sigo pensando
por las noches,
y la perdición
solo existe
si no existe un camino
de regreso.